viernes, 7 de mayo de 2010


"La odiaban, la odian los biencomidos: por pobre, por mujer, por insolente. Ella los desafía hablando y los ofendía viviendo. Nacida para sirvienta, o a lo sumo para actriz de melodramas baratos. Evita se había salido de su lugar. La querían, la quieren los malqueridos; por su boca ellos decían y maldecían. Además Evita era el hada rubia que abrazaba al leproso y al haraposo y daba paz al desesperado, el incesante manantial que prodigaba empleos y colchones, zapatos y máquinas de coser, dentaduras postizas, ajuares de novia."

"Vino del pueblo y fue hacia el pueblo, dando su vida para llevar la felicidad a los niños y ancianos, a los humildes y a los esperanzados. Donde hubo una reivindicación que conquistar o un privilegio que abatir, allí estuvo sin cálculos ni vacilaciones, corazón firme y mano firme. Que su recuerdo no llegue envuelto en llanto sino en canciones de esperanza, mientras resuena su nombre para movilizar una juramentada voluntad argentina dispuesta a defender esta tierra y este pueblo que ella amó."


1 comentario:

  1. Hola, Marelle:

    Evita es uno de aquellos personajes que enamoran y cautivan, por lo tanto nunca se olvidan y siempre quisiéramos saber más de su vida y obra.

    Un bonito recuerdo me has traído.

    Abrazos.

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